sábado, 30 de diciembre de 2017
martes, 26 de diciembre de 2017
Murió "Chino" González, cantante de La Nueva Luna
Marcelo Fabián "El Chino" González, cantante de la famosa banda tropical argentina La Nueva Luna que se formó en 1995, falleció este sábado. La noticia fue confirmada en las redes por el productor del programa Pasión de sábado, Pablo Serantoni. "Gran pérdida de la movida tropical amigo estuviste conmigo la p… madre!!! Qué injusticia!!!", escribió, para luego dar a conocer el triste hecho. "Amigos lamento informarles falleció Marcelo Chino González, una gran pérdida para la movida tropical!! Mucha tristeza y bronca!! Amigo te vimos hace dos días como si te hubieras venido a despedir", agregó el conmocionado productor.
Por otro lado, el periodista Mauro Szeta informó que el cantante fue hallado muerto en su casa del country El Rocío de Canning y que la esposa del músico declaró que éste se tomó algo para dormir poco antes de su deceso. "Se acostó temprano. Tomó algo para dormir. Escuché un ruido. Lo encontré muerto boca abajo", declaró Micaela Müller. Peritos y médicos de Policía están trabajando para determinar la causa de la muerte y el primer informe forense indica que "tanto cuerpo, como prenda de vestir no presenta signos de violencia".
Recordemos que en julio de este año, "El Chino" había sido hospitalizado en la clínica La Trinidad de Quilmes por un cuadro de "excitación psicomotriz, posterior a cuadro convulsivo". Luego de una semana de internación, el músico firmó su alta voluntaria de la clínica, para regresar al poco tiempo.
El fallecimiento de González golpeó duro al ámbito de la música tropical y Pablo Lescano, líder de Damas Gratis, se expresó al respecto en las redes: "Se te va a extrañar, ídolo. Yo crecí escuchándote chino!! Noche triste para mí y vos que te me vas para el cielo (...) Hoy la cumbia argentina está de luto", escribió.
Por otro lado, el periodista Mauro Szeta informó que el cantante fue hallado muerto en su casa del country El Rocío de Canning y que la esposa del músico declaró que éste se tomó algo para dormir poco antes de su deceso. "Se acostó temprano. Tomó algo para dormir. Escuché un ruido. Lo encontré muerto boca abajo", declaró Micaela Müller. Peritos y médicos de Policía están trabajando para determinar la causa de la muerte y el primer informe forense indica que "tanto cuerpo, como prenda de vestir no presenta signos de violencia".
Recordemos que en julio de este año, "El Chino" había sido hospitalizado en la clínica La Trinidad de Quilmes por un cuadro de "excitación psicomotriz, posterior a cuadro convulsivo". Luego de una semana de internación, el músico firmó su alta voluntaria de la clínica, para regresar al poco tiempo.
El fallecimiento de González golpeó duro al ámbito de la música tropical y Pablo Lescano, líder de Damas Gratis, se expresó al respecto en las redes: "Se te va a extrañar, ídolo. Yo crecí escuchándote chino!! Noche triste para mí y vos que te me vas para el cielo (...) Hoy la cumbia argentina está de luto", escribió.
domingo, 24 de diciembre de 2017
Scorpio vuelve con “Dime”
La agrupación Scorpio vuelve a la carga con su nuevo corte musical “Dime”.
El grupo ya cuenta con 26 años de vida musical. “Al finalizar la década del 80 en La Paz, un 20 de octubre surge el grupo Scorpio a la cabeza de mi señor padre, Edgar Medina Gonzales. Los integrantes en esa época fueron: Edgar, Wilfredo y Edmundo Medina Gonzales (+). El repertorio se caracterizaba por la cumbia de la época y la música disco del 80 con los clásicos de oro como Boney M, Rod Stewart, Dee D. Jackson, etc., y algunos temas de rock, como los de Black Sabbath, es decir rock clásico, latino y no así rock metálico. También canciones de los inolvidables Iracundos”, recuerda Percy Medina, director de la agrupación.
“Dime” es una producción propia del grupo en letra y música. “Nació de las cosas que pasan y pasaron en la vida de uno de los integrantes del grupo. Somos un conjunto versátil, ya que interpretamos no solamente cumbias, sino también éxitos del ayer, clásicos, rock y música nacional, entre otros”, agrega.
Actualmente, Scorpio tiene 18 temas grabados. Cada canción significa un momento muy importante en la vida del grupo, ya que sus integrantes mencionan que se realizó con mucho cariño y sacrificio.
“Son dos discos compactos grabados; de los cuales los temas de mayor aceptación fueron: Mujer mala cabeza, Enamorado de ti, Dime por qué, Siempre serás y Dime, entre otros. Algunos de nuestros videoclips los tenemos en la página Facebook: Scorpio Bolivia”, añade.
Al iniciar la década del 2000 surge una nueva generación del Grupo Scorpio de Bolivia, esta vez conformado por: Edgar Medina Gonzales (director), Percy (primera guitarra y vocal), Marvin Medina Soliz (teclado) Alex Quispe Blanco (reco), Erick Medina Salas (batería), Edy Flores Balboa (percusión), Pedro V. Gomez (bajo) y Santos Pinaya (sonidista).
lunes, 18 de diciembre de 2017
“En vivo” Los éxitos de Caramelo en el DVD “36 años”
La orquesta internacional Caramelo acaba de lanzar al mercado su nueva producción fonográfica. Se trata del DVD de colección “36 años”, el cual fue grabado totalmente “en vivo”.
El material, producido por Jhefos y F&S Producciones, contiene los grandes éxitos de esta conocida agrupación orquestal en el contagiante ritmo tropical de la cumbia, además de una selección de morenadas.
Teddy Flores y Jean Paul Aduviri, director y vocalista de Caramelo, respectivamente, conversaron con La Guía y esto fue lo que nos contaron.
LG: ¿CUÁNDO Y DÓNDE FUE GRABADO EL DVD?
JP: El material se grabó en agosto en la Plaza Mayor de San Francisco y contiene una compilación de las mejores canciones de la orquesta Caramelo grabadas en estos 36 años de vida artística. El DVD contiene el concierto grabado y también como material adicional hemos decidido añadir los videos que hemos sacado con la orquesta.
LG: ¿ESTE ES EL PRIMER MATERIAL QUE SACAN EN DVD?
T: Sí, es el primer material, a pesar de que se ha filmado también algunos importantes conciertos. Por ejemplo, a los 31 años se realizó un concierto en la plaza Villarroel y no pudimos sacar el material, así que este es el primero. Nuestro objetivo principal es que nuestro público aprecie todas las grabaciones que están en el DVD, son temas de los años 80, 90 y actuales también. Desde las primeras grabaciones están recopiladas acá. Son recuerdos más que todo, ¿no?
LG: ¿QUÉ SIGNIFICA PARA CARAMELO CUMPLIR 36 AÑOS DE VIDA?
T: Bueno, es un gran orgullo y una enorme satisfacción. Desde la fundación del grupo, ésta es la tercera generación de integrantes, en la que yo quedo como director. Soy el único mayor porque el resto son jóvenes.
LG: ¿A QUÉ SE DEBE LA VIGENCIA DEL GRUPO?
T: Básicamente a tener la capacidad de entender a todos los integrantes. Tiene que haber un buen manejo de la psicología y ser perseverante, porque no todos los integrantes son iguales, ¿no? y uno debe saber sobrellevar. Es entender la forma de trabajo, la responsabilidad y la disciplina.
LG: ¿TÚ, JEAN PAUL, QUÉ TIEMPO ESTÁS EN LA ORQUESTA?
JP: Este 2017 cumplí 6 años y me siento agradecido con Dios porque me ha permitido llegar a esta orquesta, actualmente soy la primera voz. Es un honor haber llegado a Caramelo. Desde el primer año que ingresé a la orquesta, cada gestión grabamos una canción y estoy muy feliz. La grabación del DVD fue la cereza de la torta porque creo que a la orquesta le faltaba eso.
LG: ¿QUÉ DESTACAS DE CARAMELO?
JP: El profesionalismo de los músicos, hay una buena simbiosis entre la experiencia y la juventud. La parte más linda son los bronces, son músicos militares y también hay músicos del Conservatorio. Estar con ellos día a día te exige demasiado para estar a su nivel.
LG: ¿CUÁL ES EL ESTILO DE LA ORQUESTA?
JP: Bueno, hace un año le pusimos una frase… “Dulce Caramelo, el orgullo paceño”, porque esta orquesta realmente tiene lindas composiciones desde sus inicios
LG: ¿QUÉ DISTINGUE A CARAMELO DE OTRAS ORQUESTAS?
T: La instrumentación y los arreglos.
LG: ¿CUÁNTOS DISCOS HAN GRABADO?
T: La primera grabación fue el año 1981 y hasta la fecha deben ser 46 discos.
LG: ¿DESEAN AGREGAR ALGO?
JP: Estos 36 años no hubiesen sido posibles sin el apoyo fundamental de la familia Flores y la familia de mis compañeros y el respaldo de mi esposa.
ALGO DE HISTORIA Y LOS TEMAS DEL MATERIAL
La orquesta internacional Caramelo fue creada el 22 de octubre de 1981 por Teddy Flores Aguilar con el objetivo de revolucionar el ámbito de la música cumbiera y música nacional.
Su primer éxito fue, sin duda, la canción “Maridito de oro”, interpretada por la encantadora voz de Esperanza Rada y grabada en la empresa Heriba.
A lo largo de estos 36 años de carrera musical, la agrupación ha tenido innumerables presentaciones artísticas en el país y también en el extranjero, en Chile, Argentina, Brasil y Perú.
Su más reciente material, el DVD “36” años, contiene canciones como “Te lo pido de rodillas”, “Que no quede huellas”, “Par de anillos”, “Tarjetita”, “Coralí”, “Que me perdone tu señora”, “Amargo y dulce”, “Gaviota”, “El cartero”, “Quien te crees”, “Ya no quiero ser tu amor” y “Olvídame”.
Para contactos y pedidos, llamar al teléfono 2489373 y a los celulares 78752146 y 71587632.
LOS INTEGRANTES DE LA ORQUESTA
Fedra Gutiérrez (vocalista)
Jean Paul Aduviri (vocalista)
César Atea (vocalista)
Teddy Flores (director)
Gudnar Herrera (trompeta)
Wilmer Barra (trombón)
Miguel A. Quisbert (bajo)
Brayan Bautista (guitarra)
Jorge Flores (teclado)
Diego Apaza (batería)
Alan Conde (tumbas)
Kennet Reyes (reco)
El material, producido por Jhefos y F&S Producciones, contiene los grandes éxitos de esta conocida agrupación orquestal en el contagiante ritmo tropical de la cumbia, además de una selección de morenadas.
Teddy Flores y Jean Paul Aduviri, director y vocalista de Caramelo, respectivamente, conversaron con La Guía y esto fue lo que nos contaron.
LG: ¿CUÁNDO Y DÓNDE FUE GRABADO EL DVD?
JP: El material se grabó en agosto en la Plaza Mayor de San Francisco y contiene una compilación de las mejores canciones de la orquesta Caramelo grabadas en estos 36 años de vida artística. El DVD contiene el concierto grabado y también como material adicional hemos decidido añadir los videos que hemos sacado con la orquesta.
LG: ¿ESTE ES EL PRIMER MATERIAL QUE SACAN EN DVD?
T: Sí, es el primer material, a pesar de que se ha filmado también algunos importantes conciertos. Por ejemplo, a los 31 años se realizó un concierto en la plaza Villarroel y no pudimos sacar el material, así que este es el primero. Nuestro objetivo principal es que nuestro público aprecie todas las grabaciones que están en el DVD, son temas de los años 80, 90 y actuales también. Desde las primeras grabaciones están recopiladas acá. Son recuerdos más que todo, ¿no?
LG: ¿QUÉ SIGNIFICA PARA CARAMELO CUMPLIR 36 AÑOS DE VIDA?
T: Bueno, es un gran orgullo y una enorme satisfacción. Desde la fundación del grupo, ésta es la tercera generación de integrantes, en la que yo quedo como director. Soy el único mayor porque el resto son jóvenes.
LG: ¿A QUÉ SE DEBE LA VIGENCIA DEL GRUPO?
T: Básicamente a tener la capacidad de entender a todos los integrantes. Tiene que haber un buen manejo de la psicología y ser perseverante, porque no todos los integrantes son iguales, ¿no? y uno debe saber sobrellevar. Es entender la forma de trabajo, la responsabilidad y la disciplina.
LG: ¿TÚ, JEAN PAUL, QUÉ TIEMPO ESTÁS EN LA ORQUESTA?
JP: Este 2017 cumplí 6 años y me siento agradecido con Dios porque me ha permitido llegar a esta orquesta, actualmente soy la primera voz. Es un honor haber llegado a Caramelo. Desde el primer año que ingresé a la orquesta, cada gestión grabamos una canción y estoy muy feliz. La grabación del DVD fue la cereza de la torta porque creo que a la orquesta le faltaba eso.
LG: ¿QUÉ DESTACAS DE CARAMELO?
JP: El profesionalismo de los músicos, hay una buena simbiosis entre la experiencia y la juventud. La parte más linda son los bronces, son músicos militares y también hay músicos del Conservatorio. Estar con ellos día a día te exige demasiado para estar a su nivel.
LG: ¿CUÁL ES EL ESTILO DE LA ORQUESTA?
JP: Bueno, hace un año le pusimos una frase… “Dulce Caramelo, el orgullo paceño”, porque esta orquesta realmente tiene lindas composiciones desde sus inicios
LG: ¿QUÉ DISTINGUE A CARAMELO DE OTRAS ORQUESTAS?
T: La instrumentación y los arreglos.
LG: ¿CUÁNTOS DISCOS HAN GRABADO?
T: La primera grabación fue el año 1981 y hasta la fecha deben ser 46 discos.
LG: ¿DESEAN AGREGAR ALGO?
JP: Estos 36 años no hubiesen sido posibles sin el apoyo fundamental de la familia Flores y la familia de mis compañeros y el respaldo de mi esposa.
ALGO DE HISTORIA Y LOS TEMAS DEL MATERIAL
La orquesta internacional Caramelo fue creada el 22 de octubre de 1981 por Teddy Flores Aguilar con el objetivo de revolucionar el ámbito de la música cumbiera y música nacional.
Su primer éxito fue, sin duda, la canción “Maridito de oro”, interpretada por la encantadora voz de Esperanza Rada y grabada en la empresa Heriba.
A lo largo de estos 36 años de carrera musical, la agrupación ha tenido innumerables presentaciones artísticas en el país y también en el extranjero, en Chile, Argentina, Brasil y Perú.
Su más reciente material, el DVD “36” años, contiene canciones como “Te lo pido de rodillas”, “Que no quede huellas”, “Par de anillos”, “Tarjetita”, “Coralí”, “Que me perdone tu señora”, “Amargo y dulce”, “Gaviota”, “El cartero”, “Quien te crees”, “Ya no quiero ser tu amor” y “Olvídame”.
Para contactos y pedidos, llamar al teléfono 2489373 y a los celulares 78752146 y 71587632.
LOS INTEGRANTES DE LA ORQUESTA
Fedra Gutiérrez (vocalista)
Jean Paul Aduviri (vocalista)
César Atea (vocalista)
Teddy Flores (director)
Gudnar Herrera (trompeta)
Wilmer Barra (trombón)
Miguel A. Quisbert (bajo)
Brayan Bautista (guitarra)
Jorge Flores (teclado)
Diego Apaza (batería)
Alan Conde (tumbas)
Kennet Reyes (reco)
San Francisco quiere seguir marcando época
La súper orquesta San Francisco quiere seguir marcando época en la música tropical nacional, así como lo ha hecho en sus 36 años de vida artística, en los que escribió con letras de oro sus canciones en los pentagramas de los corazones bolivianos, afirmó su director, Benny Mendoza.
Con ese objetivo, recientemente lanzó al mercado su más reciente trabajo discográfico, titulado “Mala Mujer”, nombre que también lleva el primer corte del álbum, que se ya escucha en las emisoras más importantes del país y que va pegando de a poco en el público pachanguero.
Esta canción viene de la mano de esta conocida orquesta en homenaje a la cubana Sonora Matancera, con este tema que fue un éxito en 1920, pero que ahora llega con el estilo de San Francisco.
Mendoza comentó que están muy felices y contentos por ofrecer este flamante material con música variada, lleno de ritmos cadenciosos, como la infaltable salsa, cumbia, morenada y el ritmo de moda salay.
“No sólo entregamos esta sorpresa. Muy pronto daremos a conocer a nuestro público fiel las grabaciones, anécdotas, actuaciones, viajes y amigos que fueron parte de San Francisco, con historias maravillosas de estos 36 años, en un texto amplio con la historia de la orquesta en la que estoy trabajando. Son memorias escritas con el corazón, donde nuestro público podrá entender a ciencia cierta qué es San Francisco”, destacó Mendoza.
El origen de la orquesta se remonta a finales del año 1980, exactamente al 15 de diciembre. Pero dos años antes, en 1978, Benny Mendoza ya formaba parte de la orquesta Atlántida como tecladista.
El año 1980 recibe la propuesta de Jhonny Altamirano, vocalista, y Edwin Alba, primera guitarra, ambos ex integrantes de la orquesta Atlántida, para formar una nueva agrupación en la que Benny Mendoza sería el director y líder a la vez. Así nace la orquesta “San Francisco Los Panchos”, rememora su creador y actual director.
En 1981 la orquesta graba su primer disco con 10 temas musicales en la prestigiosa empresa Lauro Records con el éxito “Sorbito de champán”, todo un clásico tropical. En ese material se encontraban los temas “Presumida”, “Pasarán los días”, “Que Dios te aleje de mí”, “Tu corazón y el mío”, “Los pobres también somos felices”, “Mírame un poquito más”, “Te buscaré” y “Arrepiéntete”. “Estos temas han sido reeditados por varias agrupaciones, pero ésta en particular fue una de las mejores interpretaciones a nivel latinoamericano y en nuestro mercado nacional especialmente”, resalta el músico.
Mendoza recordó con nostalgia a los integrantes de esa época: Jhonny Altamirano (primera voz), Rubén Flores (baterista), Edwin Alba (primera guitarra), Omar León (bajista), Walter Cruz (segunda trompeta), Pascual Artesana (primera trompeta) y Justo Condori (tercera trompeta).
“Una anécdota especial de esta grabación fue que Jhonny Altamirano no se presentó a la grabación del disco, aduciendo motivos personales. Por tal razón, la empresa disquera hace extensiva la invitación a Pitty Zapata como vocalista para la grabación, pues el tiempo que teníamos era muy limitado y el disco tenía que salir al público o si no se postergaría por un año. Gracias al profesionalismo y habilidad de Pitty se hizo posible terminar la grabación de nuestro primer disco”, recuerda Mendoza.
“Hasta ese entonces, el estilo de la orquesta era de sonora, con trompetas y nos llamábamos simplemente el Súper Grupo San Francisco. Hasta el año 1990 se realizó la mayor parte de la grabación musical con Pitty Zapata, con canciones que se han vuelto clásicos. Tanto así que hasta el día de hoy se las difunde por los medios de comunicación en Bolivia y el exterior”, resalta el director.
En la década de los años 90 muchos fueron los artistas profesionales que formaron parte de la orquesta San Francisco. Entre los más conocidos figuran nombres como los de Cacho Tirado, Jorge Chávez, Wimar Medrano, Alfredo García, Sandra Romero, Nancy Alvares, Yoset Aguilar (voces), Juan Arce Miranda (representante +) y Alberto Poma (trompeta +).
Mendoza destaca que en estos 37 años de vida, además de haber recorrido Bolivia y otros países, San Francisco obtuvo sendos discos de oro los años 1981, 1990 y 1995, un importante reconocimiento de la Brigada Parlamentaria por su trayectoria musical y muchos más galardones.
Actualmente los integrantes de la orquesta son: Rubén Veizaga (voz), Eliana Pizarroso (voz), Israel Galarreta (voz), Ramiro Quisberth (percusión), Arturo Rodríguez (guitarra), Marcelo Apaza (tumbas), René Lliully (guitarra), Julio Poma (trompeta), Wilder Llanos (trompeta), Hernán Bautista (trombón), Benny Mendoza (teclado y dirección) y Omar León (soporte técnico).
“Sólo nos queda hacer extensiva la invitación para unirse a este maravilloso sueño denominado la súper orquesta tropicalera viento en popa San Francisco”, concluyó Mendoza.
Con ese objetivo, recientemente lanzó al mercado su más reciente trabajo discográfico, titulado “Mala Mujer”, nombre que también lleva el primer corte del álbum, que se ya escucha en las emisoras más importantes del país y que va pegando de a poco en el público pachanguero.
Esta canción viene de la mano de esta conocida orquesta en homenaje a la cubana Sonora Matancera, con este tema que fue un éxito en 1920, pero que ahora llega con el estilo de San Francisco.
Mendoza comentó que están muy felices y contentos por ofrecer este flamante material con música variada, lleno de ritmos cadenciosos, como la infaltable salsa, cumbia, morenada y el ritmo de moda salay.
“No sólo entregamos esta sorpresa. Muy pronto daremos a conocer a nuestro público fiel las grabaciones, anécdotas, actuaciones, viajes y amigos que fueron parte de San Francisco, con historias maravillosas de estos 36 años, en un texto amplio con la historia de la orquesta en la que estoy trabajando. Son memorias escritas con el corazón, donde nuestro público podrá entender a ciencia cierta qué es San Francisco”, destacó Mendoza.
El origen de la orquesta se remonta a finales del año 1980, exactamente al 15 de diciembre. Pero dos años antes, en 1978, Benny Mendoza ya formaba parte de la orquesta Atlántida como tecladista.
El año 1980 recibe la propuesta de Jhonny Altamirano, vocalista, y Edwin Alba, primera guitarra, ambos ex integrantes de la orquesta Atlántida, para formar una nueva agrupación en la que Benny Mendoza sería el director y líder a la vez. Así nace la orquesta “San Francisco Los Panchos”, rememora su creador y actual director.
En 1981 la orquesta graba su primer disco con 10 temas musicales en la prestigiosa empresa Lauro Records con el éxito “Sorbito de champán”, todo un clásico tropical. En ese material se encontraban los temas “Presumida”, “Pasarán los días”, “Que Dios te aleje de mí”, “Tu corazón y el mío”, “Los pobres también somos felices”, “Mírame un poquito más”, “Te buscaré” y “Arrepiéntete”. “Estos temas han sido reeditados por varias agrupaciones, pero ésta en particular fue una de las mejores interpretaciones a nivel latinoamericano y en nuestro mercado nacional especialmente”, resalta el músico.
Mendoza recordó con nostalgia a los integrantes de esa época: Jhonny Altamirano (primera voz), Rubén Flores (baterista), Edwin Alba (primera guitarra), Omar León (bajista), Walter Cruz (segunda trompeta), Pascual Artesana (primera trompeta) y Justo Condori (tercera trompeta).
“Una anécdota especial de esta grabación fue que Jhonny Altamirano no se presentó a la grabación del disco, aduciendo motivos personales. Por tal razón, la empresa disquera hace extensiva la invitación a Pitty Zapata como vocalista para la grabación, pues el tiempo que teníamos era muy limitado y el disco tenía que salir al público o si no se postergaría por un año. Gracias al profesionalismo y habilidad de Pitty se hizo posible terminar la grabación de nuestro primer disco”, recuerda Mendoza.
“Hasta ese entonces, el estilo de la orquesta era de sonora, con trompetas y nos llamábamos simplemente el Súper Grupo San Francisco. Hasta el año 1990 se realizó la mayor parte de la grabación musical con Pitty Zapata, con canciones que se han vuelto clásicos. Tanto así que hasta el día de hoy se las difunde por los medios de comunicación en Bolivia y el exterior”, resalta el director.
En la década de los años 90 muchos fueron los artistas profesionales que formaron parte de la orquesta San Francisco. Entre los más conocidos figuran nombres como los de Cacho Tirado, Jorge Chávez, Wimar Medrano, Alfredo García, Sandra Romero, Nancy Alvares, Yoset Aguilar (voces), Juan Arce Miranda (representante +) y Alberto Poma (trompeta +).
Mendoza destaca que en estos 37 años de vida, además de haber recorrido Bolivia y otros países, San Francisco obtuvo sendos discos de oro los años 1981, 1990 y 1995, un importante reconocimiento de la Brigada Parlamentaria por su trayectoria musical y muchos más galardones.
Actualmente los integrantes de la orquesta son: Rubén Veizaga (voz), Eliana Pizarroso (voz), Israel Galarreta (voz), Ramiro Quisberth (percusión), Arturo Rodríguez (guitarra), Marcelo Apaza (tumbas), René Lliully (guitarra), Julio Poma (trompeta), Wilder Llanos (trompeta), Hernán Bautista (trombón), Benny Mendoza (teclado y dirección) y Omar León (soporte técnico).
“Sólo nos queda hacer extensiva la invitación para unirse a este maravilloso sueño denominado la súper orquesta tropicalera viento en popa San Francisco”, concluyó Mendoza.
miércoles, 13 de diciembre de 2017
Con la CUMBIA en la sangre
Cuando suben al escenario el público sabe exactamente quién es cada uno de estos cantantes. Además de sus movimientos, su ropa y sus gestos los identifica con un género: la cumbia. Durante la década de 1990 produjeron grandes éxitos, como Añoranzas, Tronco viejo y Mi secreto amor, llenaron el Teatro al Aire Libre Jaime Laredo varias veces y le dieron vida a la industria discográfica nacional. Ahora, con más de 20 años de trayectoria cada uno, David Castro, Mónica Ergueta y Jorge Eduardo Rivero ven cómo sus hijos —Sergio Castro, Shary Ergueta y Junior Rivero— siguen sus pasos.
A diferencia de sus padres, que fueron haciéndose un espacio en esta industria, Sergio, Shary y Junior han pasado su niñez en escenarios en lugar de parques, giras en vez de vacaciones y han visto conciertos abarrotados de gente, siendo conscientes de lo demandante que puede ser este trabajo. Sin embargo, ahora que han crecido —Shary tiene 18 años, Junior 25 y Sergio 28— se enamoraron de la música tropical y siguen su camino entre la admiración por las carreras de sus progenitores y una lucha por brillar con luz propia.
Un lazo familiar en el escenario
Puede que Sergio Castro tenga casi 30 años, que cante desde hace cinco como solista y que maneje un repertorio distinto al de David Castro, pero su papá es un conocedor del oficio y no puede dejar de supervisar a su hijo. “Te has venido muy simple, creo que vamos a ir a recoger ropa”, comenta mientras inspecciona el vestuario de Sergio para la sesión de fotografías. Éste argumenta que es la ropa con la que hace sus shows y su papá frunce el ceño al tiempo que busca una de sus camisas para dársela, incluso cuando aquél no la usará.
Si bien la mayor parte de las familias en las que el padre es un músico de renombre sufre por el tiempo que la estrella pasa de viaje, en este caso sucedió lo contrario. Desde el momento en que Sergio le comentó a su papá que quería seguir su camino, comenzó a acompañarlo en sus giras, lo que les permitió fortalecer el vínculo familiar que no tuvieron antes. “Como él vivía con su mamá, fue difícil convivir juntos cuando era niño. Más bien el escenario fue un lugar de encuentro para nosotros: y en el camino charlábamos y nos contábamos de todo”.
Durante los viajes aprovecharon para hablar de la profesión y para que David le enseñara su técnica y estilo. Tal vez sería la última oportunidad para hacerlo, porque sufría de una afección en las cuerdas vocales que puso en riesgo su carrera. La situación empeoró y terminó en un concierto de despedida, en 2015, que reunió a Mónica Ergueta, Jorge Eduardo, Gastón Sosa, José Luis Córdova y Miguel Orías. “Cuando mi salud estaba delicada, y yo estaba angustiado y afligido por mi carrera, sobre todo en los últimos viajes, la compañía de Sergio ha sido muy importante, me ayudó a sentirme mejor”.
El legado paterno le ha abierto puertas a Sergio, pero también le acarreó críticas muy duras, sobre todo cuando vestía como David. “Hay gente a la que sí le gusta, pero hay otra que no está conforme con que cante sus canciones. Él siempre me alienta a que haga más y a que me lance, pero soy muy tímido, todavía me falta mucho para llegar a su nivel”.
El excantante de Los Brothers quiere que su hijo comience a componer para que pueda tener más oportunidades. Gracias a los éxitos que logró con su antiguo grupo y a la cumbia villera, el que alguna vez también fue mariachi pudo hacer espectáculos solo con temas propios. Eso le permitió generar mejores ingresos y hacer shows menos extenuantes. “Quiero que Sergio saque su propio material; imitar o estar haciendo el repertorio, ya sea mío o de otros, está bien al principio, pero ya es hora de que empiece a generar sus propios éxitos y a vivir de sus propios logros. En esto tiene todo mi apoyo, lo demás depende de él y de la gente, que es la que manda”.
Pero si en 2015 los médicos le anunciaron al compositor que la afección de sus cuerdas vocales era irremediable, tras dos años David Castro volverá a la música gracias a los cuidados de diferentes especialistas en La Paz, a una operación en España y a una recuperación muy larga. “Quiero disculparme con mi público por la despedida, fue un momento muy duro para mí. Ahora ya me estoy recuperando y tengo varias sorpresas: terminaré el disco que dejamos inconcluso. En él, Sergio y yo vamos a cantar un dúo. Además ya tengo el guion de una película basada en mi canción Añoranzas, que vamos a empezar a filmar a principio de 2018”.
Mujeres de cumbia
“Si yo no quería que Shary comenzara a cantar fue porque en este trabajo hay acoso. Cuando eres una adolescente bonita no falta quien te haga comentarios inapropiados. Cuando yo era jovencita y me decían cosas desagradables, les respondía con un disparate. Pero ella es más emotiva, es más sensible”, cuenta la intérprete de Mi muchacho de blue jeans.
Gracias a su rebeldía, Mónica supo defenderse de insinuaciones, críticas sobre su estilo y comentarios discriminatorios que recibió. Recuerda cómo se le fueron cerrando puertas por ello y cuánto le costó conformar un grupo de músicos que la reconocieran como líder. “A los hombres no les gustaba que sea una mujer la que mande. Fue muy difícil porque no me respetaban, por eso solo he podido trabajar con músicos extranjeros”.
La música tropical y su sensualidad al vestir son para la cantante una elección personal por la que tuvo que luchar para mantenerse vigente. Su padre, Reynaldo Ergueta, la encaminó desde pequeña a componer y cantar música folklórica, que interpretaba vistiendo ponchos y ropa tradicional. Sin embargo, ella tenía una imagen completamente diferente de sí misma. Es así que en 1994, a los 13 años, entró como bailarina al grupo Los Puntos. “Dentro de mí había, y sigue habiendo, algo muy sexy: me gustaban los escotes, las minifaldas, el pelo rubio; yo quería ser una artista tropical, que vistiera con mucho brillo, pero mi papá quería otra cosa. Lograr que ellos acepten mi decisión ha sido la parte más difícil de todo”.
Mientras Mónica y Shary posan para la cámara se hacen gestos, se molestan y juegan una con la otra, parecen hermanas. Mónica fue madre soltera y sus padres ayudaron mucho en la crianza de Shary y su hermana Fernanda. Entre shows, giras, grabaciones y eventos, Shary reconoce que juzgó mal a su mamá y que solo después de experimentar en carne propia el esfuerzo que requiere este oficio, se dio cuenta de su equivocación.
“Ahora que toco con mi grupo me doy cuenta de que es muy difícil que los músicos te tomen en cuenta, es una lucha que a veces hace que me arrepienta de mi decisión. Por eso estoy muy orgullosa de mi mamá, la admiro y la entiendo. Antes yo era la primera en pensar que esto era fácil, por eso hay momentos en los que pedirle consejo me da un poco de vergüenza, sobre todo porque ella no quería que yo comience a cantar”.
Con el nuevo disco de su hija en una mano y cargando a su bebé Reily, de tres meses, en la otra, Mónica terminó por aceptar que su primogénita heredó algo de su fuerza y rebeldía; a pesar de que Shary es más dulce, lo que se refleja en el repertorio de su disco y en su forma de cantar. “Es mi primera producción y tiene tres canciones: Abrázame fuerte, Te quiero más y Sueños de amor. La primera la escogió mi abuelito y es el tema que más está sonando. Esa es la canción que me diferencia de la voz de mi mamá. Además yo le canto más al amor, soy más tierna, ella siempre fue más agresiva, más dura”.
El próximo año, Mónica cumplirá 30 años de carrera y está planificando un espectáculo que, además de mostrar su trabajo en otros géneros musicales, puede que sea su despedida de los escenarios. “Sacrifiqué mi niñez, mi maternidad y casi toda mi vida por la música. Ahora quiero disfrutar de Reily junto a mi esposo Limberth. Todavía nada es seguro, pero es lindo ver que gracias a que Shary vivió de otra manera, quiera seguir cantando”.
El escenario como escuela
Mientras Alfredo Rivero, un abogado, cantante y periodista deportivo potosino disfrutaba de una copa de vino junto a su esposa Alicia y sus invitados, escuchó una voz que salía de debajo de la mesa y cantaba la balada Lágrima seca. Se trataba de su hijo, Jorge Eduardo, de cuatro años, que habiendo probado su primer vaso de vino, descubría lo que se transformó en la pasión de su vida: el canto.
Además de haber tenido un padre que lo introdujo a la música, Jorge Eduardo pasó por muchos otros géneros antes de quedarse con la cumbia. “He cultivado el heavy metal, jazz, salsa y amo la música romántica desde niño. He cantado con grandes grupos como Swingbaly, Luz de América, Los Signos, Opus 4.40 y Los Puntos. Mi carrera me ha permitido aprender y cultivar de todo un poco”.
Gracias a que tuvo este conocimiento cerca, Junior encontró que la mejor manera de formarse era recuperar la experiencia de su familia .“Siempre me gustó el arte, la música, el baile, la actuación. Cuando el canto tomó el primer lugar, a mis 15 años, comencé a ir con mi papá a estudios y conciertos. Mi formación es empírica, empecé cantando sus canciones y aprendiendo su técnica, esa fue mi escuela, después todo lo adquirí en cancha”.
Incluso hoy, a sus 25 años de edad, cuando está a punto de sacar su primera producción discográfica como solista y su nombre ya empieza a brillar por sí mismo, cada vez que Junior comparte escenario con su papá, la fuerza de su figura lo intimida. “Hice espectáculos grandes, nacionales e internacionales, pero cuando tengo que cantar con él, me siento igual de nervioso que la primera vez”.
Otro de los aspectos que desea imitar es la ética profesional de Jorge Eduardo, en un momento en el que la industria de la música tropical ha cambiado mucho. “Antes se trabajaba mucho más por lograr el éxito, ahora tiene un poco más de mercadeo. Lo que quiere un artista es ganarse el cariño del público, pero con talento y dedicación, con el esfuerzo que le pone al producir música de calidad”.
Por su parte su padre reconoce el talento de Junior y lo apoya, sobre todo con consejos. “Estoy orgulloso de tener descendencia que siga llevando la música en este largo camino. Cuando damos espectáculos juntos, me gusta ver su desenvolvimiento, el público reacciona de forma linda, veo en él a un Jorge Eduardo hace años, recargado”, comenta el músico.
La cumbia es un género especial porque es capaz de alegrar y despertar en la gente emociones fuertes. Ellos lo saben. Pero si por un lado hacen bailar, también ayudan a sacar alguna lágrima. “Soy un romántico empedernido y me gustan esas letras lindas, cortavenas, que hablan de desamor. Esas son las canciones que me permiten continuar en este camino y ser el mimado de Bolivia”, narra Jorge Eduardo.
Sergio Shary y Junior crecieron en medio de micrófonos y cables, viendo cómo sus padres sacrificaban su tiempo y energía lejos de ellos. Están conscientes de que la música tropical puede dar comodidades y fama, pero también conflictos. Para Shary y Mónica es una lucha constante contra el machismo; para Jorge Eduardo y Junior es una forma de compartir conocimiento, y para Sergio y David fue un camino que los unió y que volverán a compartir dentro de poco tiempo.
A diferencia de sus padres, que fueron haciéndose un espacio en esta industria, Sergio, Shary y Junior han pasado su niñez en escenarios en lugar de parques, giras en vez de vacaciones y han visto conciertos abarrotados de gente, siendo conscientes de lo demandante que puede ser este trabajo. Sin embargo, ahora que han crecido —Shary tiene 18 años, Junior 25 y Sergio 28— se enamoraron de la música tropical y siguen su camino entre la admiración por las carreras de sus progenitores y una lucha por brillar con luz propia.
Un lazo familiar en el escenario
Puede que Sergio Castro tenga casi 30 años, que cante desde hace cinco como solista y que maneje un repertorio distinto al de David Castro, pero su papá es un conocedor del oficio y no puede dejar de supervisar a su hijo. “Te has venido muy simple, creo que vamos a ir a recoger ropa”, comenta mientras inspecciona el vestuario de Sergio para la sesión de fotografías. Éste argumenta que es la ropa con la que hace sus shows y su papá frunce el ceño al tiempo que busca una de sus camisas para dársela, incluso cuando aquél no la usará.
Si bien la mayor parte de las familias en las que el padre es un músico de renombre sufre por el tiempo que la estrella pasa de viaje, en este caso sucedió lo contrario. Desde el momento en que Sergio le comentó a su papá que quería seguir su camino, comenzó a acompañarlo en sus giras, lo que les permitió fortalecer el vínculo familiar que no tuvieron antes. “Como él vivía con su mamá, fue difícil convivir juntos cuando era niño. Más bien el escenario fue un lugar de encuentro para nosotros: y en el camino charlábamos y nos contábamos de todo”.
Durante los viajes aprovecharon para hablar de la profesión y para que David le enseñara su técnica y estilo. Tal vez sería la última oportunidad para hacerlo, porque sufría de una afección en las cuerdas vocales que puso en riesgo su carrera. La situación empeoró y terminó en un concierto de despedida, en 2015, que reunió a Mónica Ergueta, Jorge Eduardo, Gastón Sosa, José Luis Córdova y Miguel Orías. “Cuando mi salud estaba delicada, y yo estaba angustiado y afligido por mi carrera, sobre todo en los últimos viajes, la compañía de Sergio ha sido muy importante, me ayudó a sentirme mejor”.
El legado paterno le ha abierto puertas a Sergio, pero también le acarreó críticas muy duras, sobre todo cuando vestía como David. “Hay gente a la que sí le gusta, pero hay otra que no está conforme con que cante sus canciones. Él siempre me alienta a que haga más y a que me lance, pero soy muy tímido, todavía me falta mucho para llegar a su nivel”.
El excantante de Los Brothers quiere que su hijo comience a componer para que pueda tener más oportunidades. Gracias a los éxitos que logró con su antiguo grupo y a la cumbia villera, el que alguna vez también fue mariachi pudo hacer espectáculos solo con temas propios. Eso le permitió generar mejores ingresos y hacer shows menos extenuantes. “Quiero que Sergio saque su propio material; imitar o estar haciendo el repertorio, ya sea mío o de otros, está bien al principio, pero ya es hora de que empiece a generar sus propios éxitos y a vivir de sus propios logros. En esto tiene todo mi apoyo, lo demás depende de él y de la gente, que es la que manda”.
Pero si en 2015 los médicos le anunciaron al compositor que la afección de sus cuerdas vocales era irremediable, tras dos años David Castro volverá a la música gracias a los cuidados de diferentes especialistas en La Paz, a una operación en España y a una recuperación muy larga. “Quiero disculparme con mi público por la despedida, fue un momento muy duro para mí. Ahora ya me estoy recuperando y tengo varias sorpresas: terminaré el disco que dejamos inconcluso. En él, Sergio y yo vamos a cantar un dúo. Además ya tengo el guion de una película basada en mi canción Añoranzas, que vamos a empezar a filmar a principio de 2018”.
Mujeres de cumbia
“Si yo no quería que Shary comenzara a cantar fue porque en este trabajo hay acoso. Cuando eres una adolescente bonita no falta quien te haga comentarios inapropiados. Cuando yo era jovencita y me decían cosas desagradables, les respondía con un disparate. Pero ella es más emotiva, es más sensible”, cuenta la intérprete de Mi muchacho de blue jeans.
Gracias a su rebeldía, Mónica supo defenderse de insinuaciones, críticas sobre su estilo y comentarios discriminatorios que recibió. Recuerda cómo se le fueron cerrando puertas por ello y cuánto le costó conformar un grupo de músicos que la reconocieran como líder. “A los hombres no les gustaba que sea una mujer la que mande. Fue muy difícil porque no me respetaban, por eso solo he podido trabajar con músicos extranjeros”.
La música tropical y su sensualidad al vestir son para la cantante una elección personal por la que tuvo que luchar para mantenerse vigente. Su padre, Reynaldo Ergueta, la encaminó desde pequeña a componer y cantar música folklórica, que interpretaba vistiendo ponchos y ropa tradicional. Sin embargo, ella tenía una imagen completamente diferente de sí misma. Es así que en 1994, a los 13 años, entró como bailarina al grupo Los Puntos. “Dentro de mí había, y sigue habiendo, algo muy sexy: me gustaban los escotes, las minifaldas, el pelo rubio; yo quería ser una artista tropical, que vistiera con mucho brillo, pero mi papá quería otra cosa. Lograr que ellos acepten mi decisión ha sido la parte más difícil de todo”.
Mientras Mónica y Shary posan para la cámara se hacen gestos, se molestan y juegan una con la otra, parecen hermanas. Mónica fue madre soltera y sus padres ayudaron mucho en la crianza de Shary y su hermana Fernanda. Entre shows, giras, grabaciones y eventos, Shary reconoce que juzgó mal a su mamá y que solo después de experimentar en carne propia el esfuerzo que requiere este oficio, se dio cuenta de su equivocación.
“Ahora que toco con mi grupo me doy cuenta de que es muy difícil que los músicos te tomen en cuenta, es una lucha que a veces hace que me arrepienta de mi decisión. Por eso estoy muy orgullosa de mi mamá, la admiro y la entiendo. Antes yo era la primera en pensar que esto era fácil, por eso hay momentos en los que pedirle consejo me da un poco de vergüenza, sobre todo porque ella no quería que yo comience a cantar”.
Con el nuevo disco de su hija en una mano y cargando a su bebé Reily, de tres meses, en la otra, Mónica terminó por aceptar que su primogénita heredó algo de su fuerza y rebeldía; a pesar de que Shary es más dulce, lo que se refleja en el repertorio de su disco y en su forma de cantar. “Es mi primera producción y tiene tres canciones: Abrázame fuerte, Te quiero más y Sueños de amor. La primera la escogió mi abuelito y es el tema que más está sonando. Esa es la canción que me diferencia de la voz de mi mamá. Además yo le canto más al amor, soy más tierna, ella siempre fue más agresiva, más dura”.
El próximo año, Mónica cumplirá 30 años de carrera y está planificando un espectáculo que, además de mostrar su trabajo en otros géneros musicales, puede que sea su despedida de los escenarios. “Sacrifiqué mi niñez, mi maternidad y casi toda mi vida por la música. Ahora quiero disfrutar de Reily junto a mi esposo Limberth. Todavía nada es seguro, pero es lindo ver que gracias a que Shary vivió de otra manera, quiera seguir cantando”.
El escenario como escuela
Mientras Alfredo Rivero, un abogado, cantante y periodista deportivo potosino disfrutaba de una copa de vino junto a su esposa Alicia y sus invitados, escuchó una voz que salía de debajo de la mesa y cantaba la balada Lágrima seca. Se trataba de su hijo, Jorge Eduardo, de cuatro años, que habiendo probado su primer vaso de vino, descubría lo que se transformó en la pasión de su vida: el canto.
Además de haber tenido un padre que lo introdujo a la música, Jorge Eduardo pasó por muchos otros géneros antes de quedarse con la cumbia. “He cultivado el heavy metal, jazz, salsa y amo la música romántica desde niño. He cantado con grandes grupos como Swingbaly, Luz de América, Los Signos, Opus 4.40 y Los Puntos. Mi carrera me ha permitido aprender y cultivar de todo un poco”.
Gracias a que tuvo este conocimiento cerca, Junior encontró que la mejor manera de formarse era recuperar la experiencia de su familia .“Siempre me gustó el arte, la música, el baile, la actuación. Cuando el canto tomó el primer lugar, a mis 15 años, comencé a ir con mi papá a estudios y conciertos. Mi formación es empírica, empecé cantando sus canciones y aprendiendo su técnica, esa fue mi escuela, después todo lo adquirí en cancha”.
Incluso hoy, a sus 25 años de edad, cuando está a punto de sacar su primera producción discográfica como solista y su nombre ya empieza a brillar por sí mismo, cada vez que Junior comparte escenario con su papá, la fuerza de su figura lo intimida. “Hice espectáculos grandes, nacionales e internacionales, pero cuando tengo que cantar con él, me siento igual de nervioso que la primera vez”.
Otro de los aspectos que desea imitar es la ética profesional de Jorge Eduardo, en un momento en el que la industria de la música tropical ha cambiado mucho. “Antes se trabajaba mucho más por lograr el éxito, ahora tiene un poco más de mercadeo. Lo que quiere un artista es ganarse el cariño del público, pero con talento y dedicación, con el esfuerzo que le pone al producir música de calidad”.
Por su parte su padre reconoce el talento de Junior y lo apoya, sobre todo con consejos. “Estoy orgulloso de tener descendencia que siga llevando la música en este largo camino. Cuando damos espectáculos juntos, me gusta ver su desenvolvimiento, el público reacciona de forma linda, veo en él a un Jorge Eduardo hace años, recargado”, comenta el músico.
La cumbia es un género especial porque es capaz de alegrar y despertar en la gente emociones fuertes. Ellos lo saben. Pero si por un lado hacen bailar, también ayudan a sacar alguna lágrima. “Soy un romántico empedernido y me gustan esas letras lindas, cortavenas, que hablan de desamor. Esas son las canciones que me permiten continuar en este camino y ser el mimado de Bolivia”, narra Jorge Eduardo.
Sergio Shary y Junior crecieron en medio de micrófonos y cables, viendo cómo sus padres sacrificaban su tiempo y energía lejos de ellos. Están conscientes de que la música tropical puede dar comodidades y fama, pero también conflictos. Para Shary y Mónica es una lucha constante contra el machismo; para Jorge Eduardo y Junior es una forma de compartir conocimiento, y para Sergio y David fue un camino que los unió y que volverán a compartir dentro de poco tiempo.
martes, 12 de diciembre de 2017
domingo, 3 de diciembre de 2017
Ya es un año de Los Descendientes
Ya es un año de vida de Los Descendientes. La joven agrupación nacional apagó su primera velita el pasado 4 de noviembre, con la satisfacción de haber arrasado en la movida tropical paceña.
Los Descendientes nace de la idea de David Rubín de Celis y Omar Durán Castro, quienes luego de transitar por grupos muy reconocidos, como María Juana de Cochabamba y Código Fher de la ciudad de La Paz, deciden dar vida a un nuevo proyecto musical.
Así es como nace el grupo el 4 de noviembre del año 2016 de la mano de Omar Durán Castro, David Rubín de Celis, Fabio Fernández y Boris Roncal. “Pensamos que podríamos hacer un proyecto muy serio ya que cada uno contaba con la experiencia suficiente y la madurez como para afrontar muchos desafíos. Sabemos que no es fácil comenzar un proyecto de cero, pero como también sabíamos que el sacrificio y la dedicación nos iban a hacer grandes en cualquier momento. Y estamos agradecidos por el equipo tan compacto de trabajo que tenemos. Ellos son Diego en los teclados, Denis en el bajo, Arturo en el güiro, Alejandro en los bongos, Rafael en la segunda voz, Tavo es ingeniero de sonido, Gabriel, Ronald, Luis staff y apoyo en escenario y Valeria como coordinadora. Así que es un equipo muy grande de trabajo que hace show tras show que todo salga al 100%”, destacó Omar Durán.
En este año de trabajo, Los Descendientes grabaron los cortes “Voy a pedirte perdón”, “Dime” y “Chau, chau”, los cuales hoy son del agrado de la gente. “De estas canciones, hicimos 2 videoclips en formato 4k con la producción de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, tratando de manejar un nivel muy alto en calidad y producción. Comenzar desde ahí va a hacer posible que cada vez superemos la producción que Los Descendientes quieren manejar”, resaltó el músico.
“Estamos agradecidos con todo el público boliviano porque en tan poco tiempo la recepción y el cariño se notó inmensamente. Hemos estado en diferentes ciudades de nuestra querida Bolivia presentando nuestro show y el cariño de todo el país se notó. El objetivo de Los Descendientes es mostrar mucho profesionalismo en el ámbito artístico musical tropical. Queremos salir de nuestras fronteras y mostrar a otros países que en Bolivia hay mucho talento. Ahora se vienen tres sencillos más que ya los estamos preparando. Saldrán en enero y serán temas muy sonados y gustosos, con el estilo de Los Descendientes, siempre pensando en nuestro público”, comentó Durán.
Los Descendientes nace de la idea de David Rubín de Celis y Omar Durán Castro, quienes luego de transitar por grupos muy reconocidos, como María Juana de Cochabamba y Código Fher de la ciudad de La Paz, deciden dar vida a un nuevo proyecto musical.
Así es como nace el grupo el 4 de noviembre del año 2016 de la mano de Omar Durán Castro, David Rubín de Celis, Fabio Fernández y Boris Roncal. “Pensamos que podríamos hacer un proyecto muy serio ya que cada uno contaba con la experiencia suficiente y la madurez como para afrontar muchos desafíos. Sabemos que no es fácil comenzar un proyecto de cero, pero como también sabíamos que el sacrificio y la dedicación nos iban a hacer grandes en cualquier momento. Y estamos agradecidos por el equipo tan compacto de trabajo que tenemos. Ellos son Diego en los teclados, Denis en el bajo, Arturo en el güiro, Alejandro en los bongos, Rafael en la segunda voz, Tavo es ingeniero de sonido, Gabriel, Ronald, Luis staff y apoyo en escenario y Valeria como coordinadora. Así que es un equipo muy grande de trabajo que hace show tras show que todo salga al 100%”, destacó Omar Durán.
En este año de trabajo, Los Descendientes grabaron los cortes “Voy a pedirte perdón”, “Dime” y “Chau, chau”, los cuales hoy son del agrado de la gente. “De estas canciones, hicimos 2 videoclips en formato 4k con la producción de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, tratando de manejar un nivel muy alto en calidad y producción. Comenzar desde ahí va a hacer posible que cada vez superemos la producción que Los Descendientes quieren manejar”, resaltó el músico.
“Estamos agradecidos con todo el público boliviano porque en tan poco tiempo la recepción y el cariño se notó inmensamente. Hemos estado en diferentes ciudades de nuestra querida Bolivia presentando nuestro show y el cariño de todo el país se notó. El objetivo de Los Descendientes es mostrar mucho profesionalismo en el ámbito artístico musical tropical. Queremos salir de nuestras fronteras y mostrar a otros países que en Bolivia hay mucho talento. Ahora se vienen tres sencillos más que ya los estamos preparando. Saldrán en enero y serán temas muy sonados y gustosos, con el estilo de Los Descendientes, siempre pensando en nuestro público”, comentó Durán.
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